Definición
Es un estiramiento o ruptura parcial o completa del ligamento colateral externo de la rodilla. (El término “lateral” hace referencia al ligamento que está en la parte exterior de la rodilla).
Consideraciones generales
Un examen físico centrado en la evaluación de LCL puede revelar laxitud en el mismo. Para realizar esta evaluación, la rodilla se flexiona a 25 grados y se ejerce presión en la superficie interna.
Otros exámenes pueden incluir:
Además del examen y la historia médica completa, los procedimientos para diagnosticar una lesión de un ligamento de la rodilla pueden incluir los siguientes:
- Rayos X – examen de diagnóstico que usa rayos invisibles de energía electromagnética para obtener imágenes de tejidos internos, huesos y órganos en una placa.
- Imágenes por Resonancia Magnética (su sigla en inglés es MRI) – procedimiento de diagnóstico que utiliza una combinación de imanes grandes, radiofrecuencias y una computadora para producir imágenes detalladas de los órganos y las estructuras dentro del cuerpo; puede detectar a menudo daños o enfermedades en un ligamento o músculo circundante.
- Tomografía computarizada (También llamada escáner CT o CAT.) – procedimiento de diagnóstico por imagen que utiliza una combinación de rayos X y tecnología computarizada para producir imágenes transversales (a menudo llamadas “rebanadas”) del cuerpo, tanto horizontales como verticales, del cuerpo. Una tomografía computarizada muestra imágenes detalladas de cualquier parte del cuerpo, incluidos los huesos, los músculos, la grasa y los órganos. La tomografía computarizada es más detallada que los rayos X regulares.
- Artroscopia – procedimiento de diagnóstico y tratamiento de invasión mínima que se utiliza en las condiciones de las articulaciones. En este procedimiento se emplea un pequeño tubo óptico iluminado (artroscopio) que se inserta en la articulación a través de una pequeña incisión practicada en ella. Las imágenes del interior de la articulación se proyectan en una pantalla y se utilizan para evaluar cualquier cambio degenerativo y, o artrítico en la articulación, para detectar enfermedades y tumores de los huesos y para determinar las causas de la inflamación o dolor de los huesos.
- Escáner por radionúclidos de los huesos – técnica nuclear de diagnóstico por imágenes que utiliza una cantidad mínima de material radioactivo que se inyecta en la corriente sanguínea del paciente para que sea detectado por un escáner. Este examen muestra el flujo sanguíneo hacia el hueso y la actividad celular dentro de él.
Causas
El ligamento lateral externo se extiende desde la superficie superior externa del peroné (el hueso sobre la parte exterior de la parte baja de la pierna) hasta la superficie inferior externa del fémur (el hueso de la cadera). Este ligamento estabiliza la rodilla en la parte externa de la articulación.
El LCE se lesiona generalmente debido a la presión ejercida sobre la articulación de la rodilla desde el interior, ocasionando tensión sobre la parte externa de la articulación (presión en varo).
Síntomas
- Dolor de rodilla o sensibilidad a lo largo de la cara externa de la rótula
- Puede haber inflamación de la rodilla
- Se puede presentar inestabilidad de la rodilla
Primeros auxilios:
El tratamiento inicial de una lesión del ligamento colateral externo comprende aplicación de hielo en el área, elevación de la articulación (por encima del nivel del corazón), medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINES), como aspirina e ibuprofeno, y actividad física limitada hasta que el dolor y la inflamación cedan.
Generalmente, es necesaria la inmovilización durante un tiempo para lograr el alivio del dolor y la cicatrización. La fisioterapia generalmente ayuda a que se vuelva a ganar fuerza y flexibilidad.
Para los casos aislados de esta lesión, generalmente no es necesario llevar a cabo una cirugía. Sin embargo, este ligamento se lesiona comúnmente durante un trauma significativo, incluyendo dislocaciones de la rodilla. Cuando las lesiones al ligamento colateral externo ocurren con otras lesiones de ligamentos, es necesaria la reparación para prevenir la inestabilidad futura de la rodilla.
Se debe buscar asistencia médica si la persona se lesiona una rodilla y presenta síntomas de lesión del ligamento colateral externo. Asimismo, si la persona se está tratando por una lesión de dicho ligamento y observa aumento de inestabilidad en la rodilla; si el dolor o el edema regresan después de que inicialmente se habían resuelto; si la lesión no parece estar sanando con el tiempo o si la persona se lesiona nuevamente.
Prevención
Se recomienda utilizar técnicas adecuadas al realizar ejercicio o practicar deportes. A pesar de esto, muchos casos no se pueden prevenir.
Tratamiento
Si la cicatrización es completa, es habitualmente poco efectiva, dada su forma de cordón, por lo que se debe operar, y mantener inmovilizado durante un periodo de varias semanas.
- Si es parcial, se puede esperar una buena cicatrización y no necesita cirugía, empleándose un vendaje elástico o una inmovilización con yeso, durante cinco o seis semanas en los casos más serios.
- Si no se ha detectado en su momento y ha pasado tiempo (lesión crónica), el tratamiento será operatorio: se construye uno nuevo a partir de tendones.
- Durante la inmovilización, el paciente realizará ejercicios de tonificación de los músculos de la pierna, para evitar que se atrofien.
Tras la inmovilización, el médico indicará un programa de fisioterapia para ganar movilidad y fuerza en la rodilla, permitiéndose los ejercicios vigorosos cuando desaparezca la inestabilidad.