Este artículo consta de dos Partes. En la primera parte hablaremos de las posibles enfermedades o lesiones que puede provocar las altas temperaturas en el deporte y como afectan al rendimiento físico. Analizaremos las causas, su tratamiento y sus medidas preventivas. En la Parte II veremos que es un golpe de calor y aprenderemos a socorrer al deportista así como la importancia de hidratarse bien.
Está demostrado que las altas temperaturas perjudican el normal funcionamiento de los organismos que forman el cuerpo humano. Pero es un problema generalizado. A pesar de que existen ciertos grupos de riesgo, nadie está libre de sufrir problemas por el calor.
Es evidente que aquellas personas que sufren enfermedades debilitantes (por ejemplo, las lesiones cardiacas), resisten peor el ataque térmico. Cuando hace mucho calor el corazón debe realizar un esfuerzo adicional. Esto puede ser excesivo para un paciente cardiovascular. Pero estos casos son consecuencia de problemas patológicos. La preocupación para los fisiólogos es por qué sufren estos problemas de calor las personas médicamente sanas.
Existen patologías que afectan a un mayor número de personas durante el verano. Una de ellas es el agotamiento, que surge al cabo de varios días de calor y por una mala hidratación y sudoración excesiva. La deshidratación es muy habitual. Debido al intenso sudor se pierden muchos líquidos. El agotamiento es el preludio de dolores de cabeza, cefaleas, calambres, dolores de articulaciones, etc…
Bajo la influencia de altas presiones atmosféricas (anticiclones) son más probables las trombosis y las embolias. Ello viene propiciado por el espesamiento de la sangre a medida que pierde lentamente su componente acuoso. En el caso de personas con arterias coronadas delicadas, las posibilidades de sufrir un infarto de miocardio se incrementan a partir de una temperatura de 30º. Además los cambios bruscos de temperatura (bochorno tras tormenta) favorecen las molestias reumáticas, jaquecas, dolores de cabeza y migrañas
Guía para conciliar calor y deporte
Hacer deportes en tiempos cálidos y húmedos obliga a tomar ciertas precauciones. Si te gustan los deportes, ten esta guía siempre a mano
Los calambres, agotamientos, dificultades de movimiento, y golpes de calor, comienzan generalmente en circunstancias similares, es decir cuando un deportista sale de golpe al clima caluroso, sin ajustarse gradualmente al mismo, y posee una relativa deshidratación.
Estos problemas pueden ser incluso severos, por lo que en esos caso se necesitará una atención médica de emergencia. Pero todos estos feos y peligrosos sucesos se podrían evitar si las personas se tomaran un tiempo para ajustarse al calor, ingirieran los líquidos adecuados, y mantuvieran una dieta adecuada de electrolitos.
Calambres por calor
Causas
Las principales causas que provocan este tipo de calambres, son un inadecuado ajuste al tiempo cálido, una gran perdida de agua a causa de la transpiración, o una disminución en los niveles de electrolitos en la sangre, y su no adecuado reemplazo, la pérdida de líquidos y la pérdida de peso, sin su correspondiente reemplazo, durante algún entrenamiento previo.
Signos clínicos y síntomas
Se sufre de un espasmo y dolor incontrolable en los músculos de los brazos, las piernas, y/o el abdomen, acompañado todo de una fuerte transpiración.
Tratamientos
Es imprescindible beber muchos líquidos, estirando suavemente y dando masajes a los músculos acalambrados; descansar en ambiente fresco, y aplicar hielo al área acalambrada; Esté muy atento también a los problemas de respiración de corazón.
Prevención
Se debe mantener una ingesta de líquidos adecuada, para reemplazar las pérdidas provocadas por el sudor. Para esto, 15 o 30 minutos antes del ejercicio, se debe beber 16 oz. de líquido, durante el ejercicio se deben beber 8oz. cada de 15 minutos, y al terminar el ejercicio se deben beber 16 oz. de agua/ o líquido electrolito, como las aguas salificadas, por cada medio kilo perdido; aumentar el ejercicio; usar ropas livianas y claras, como por ejemplo las mallas, y no consumir alcohol, café, bebidas con cafeína, o gaseosas para reemplazar el agua.
Agotamiento por calor
Causas
La larga exposición a ambientes muy cálidos y/o húmedo; experimentar mucha transpiración; no reemplazar adecuadamente los líquidos y los electrolitos; perder peso por entrenamientos previos y no reemplazarlos.
Signos clínicos y síntomas
Piel muy fría, pálida y húmeda; mucha transpiración; dolores de cabeza; mareos; poca coordinación; falta de lucidez mental; pupilas ampliadas; náuseas; vómitos; fatigas; debilidad; sensación continua de sed; orinar muy poco y con color amarillo brillante; falta de raciocinio.
Tratamiento
En primer lugar, se debe frenar la actividad física, descansar en un área fresca, y humedecer todo el cuerpo con una esponja con agua; se debe beber agua hasta reemplazar la pérdida de peso con aproximadamente 16 oz. de líquido por cada medio kilo perdido, y estar muy atento de los problemas de respiración o de corazón. En el caso de que la recuperación no ocurra rápidamente, será importante solicitar atención médica de inmediato.
Prevención
Se debe mantener una ingesta de líquidos adecuada, para reemplazar las pérdidas provocadas por el sudor. Para esto, 15 o 30 minutos antes del ejercicio, se debe beber 16 oz. de líquido, durante el ejercicio se deben beber 8oz. cada de 15 minutos, y al terminar el ejercicio se deben beber 16 oz. de agua/ o líquido electrolito, como las aguas salificadas, por cada medio kilo perdido; aumentar el ejercicio; usar ropas livianas y claras, como por ejemplo las mallas, y no consumir alcohol, café, bebidas con cafeína, o gaseosas para reemplazar el agua.
Insolación
Causas
El sistema de control de la temperatura corporal deja de funcionar.
Signos clínicos y síntomas
Piel caliente, seca y roja; falta de sudor; pulso acelerado; confusiones; mareos; pérdida de conciencia; temperaturas corporales elevadas.
Tratamiento
Se trata de una emergencia médica, por lo que es imprescindible solicitar asistencia apenas se experimenten los primeros síntomas. Durante la espera, se debe tomar abundante agua y refrescar el cuerpo ventilando el espacio en la que la persona se encuentra, poniendo el cuerpo en agua fría, o humedeciéndolo con paños húmedos o con hielos, pero nunca se debe dejar de concurrir a un centro médico; se debe también estar atento de la temperatura corporal y de los problemas de respiración o cardíacos.
Prevención
Se debe mantener una ingesta de líquidos adecuada, para reemplazar las pérdidas provocadas por el sudor. Para esto, 15 o 30 minutos antes del ejercicio, se debe beber 16 oz. de líquido, durante el ejercicio se deben beber 8oz. cada de 15 minutos, y al terminar el ejercicio se deben beber 16 oz. de agua/ o líquido electrolito, como las aguas salificadas, por cada medio kilo perdido; aumentar el ejercicio; usar ropas livianas y claras, como por ejemplo las mallas, y no consumir alcohol, café, bebidas con cafeína, o gaseosas para reemplazar el agua.